VALÈNCIA, 18 (EUROPA PRESS)
Heineken España y la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de la Generalitat Valenciana han renovado por cuatro años el acuerdo de colaboración firmado en 2017 para profundizar en el desarrollo del Proyecto Albufera y así consolidar el balance hídrico neutro ya conseguido, en su objetivo de devolver a la naturaleza toda el agua que contienen sus cervezas.
Hasta la fecha, el resultado de estas acciones es la restitución a l’Albufera de más de 400 millones de litros de agua al año. Esta iniciativa, sumada a los proyectos de compensación hídrica realizados en 2018 y 2021 en Doñana y en el río Jarama, permite devolver al entorno un total de 1.900 millones de litros de agua cada año, más del 100% del agua que contienen todas las cervezas que elabora en España.
De esta forma, la cervecera consigue que sus cuatro fábricas en España tengan un balance hídrico neutro casi una década antes de la fecha que se había marcado a nivel global, según ha informado la compañía en un comunicado.
La intervención en l’Albufera, donde Heineken invertirá en total –desde 2017– alrededor de 400.000 euros, ha consistido en la eliminación de la plaga de caña común (invasora que consume diez veces más agua que una planta autóctona) que afectaba al Barranco del Poyo a su paso por Quart de Poblet y en la regeneración de la zona con flora y fauna autóctona.
Esta actuación ha permitido mejorar su funcionalidad ecológica, ya que se ha creado el ambiente y las condiciones propicias para su biodiversidad. Además, esta acción contribuye directamente en la recuperación del suelo, imprescindible para retener y canalizar correctamente el agua, y evitar así las fuertes avenidas de aguas abajo en temporales de lluvia cada vez más frecuentes en la Comunitat.
«COMBATIR EFECTOS DE LA CRISIS CLIMÁTICA»
La directora de Relaciones Corporativas y Sostenibilidad de Heineken España, Carmen Ponce, ha indicado que la empresa «lleva años con el cuidado de las fuentes de agua para contribuir a que el ciclo recupere su estado natural y combatir los efectos de la crisis climática». «Un ejemplo es este Proyecto Albufera, muestra de nuestro compromiso con la Comunitat Valenciana desde hace casi 50 años», ha agregado.
«El vínculo que tenemos con esta región nos hace asumir la responsabilidad de crecer de forma sostenible, con la contribución al progreso del territorio y de las personas con las que convivimos. Porque somos decididamente verdes y tenemos muy claro que nuestro propósito es hacer cervezas que le gusten al mundo, a las personas y al planeta», ha manifestado Ponce.
Por su parte, la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, ha destacado «el necesario compromiso empresarial para conciliar la actividad económica asentada en el territorio con un modelo productivo sostenible y de valor añadido para la Comunitat Valenciana, a través de una hoja de ruta que refleje acciones en positivo sobre el entorno del que forman parte».
CERVEZA, 95% AGUA
Aproximadamente el 95% de la cerveza es agua y este recurso también se utiliza a lo largo de toda la cadena de valor del producto, por lo que la compañía considera «indispensable» la reducción al máximo del consumo de este bien en sus fábricas y la intervención de manera «positiva» en el medio ambiente de las zonas donde desarrolla su actividad. Todo ello se enmarca en su estrategia de sostenibilidad ‘Brindando un mundo mejor’, que se implementa en sus instalaciones de Quart de Poblet.
Por una parte, ha puesto en marcha diversas medidas que han logrado rebajar un 33% el uso de agua en los últimos años en los procesos de elaboración. Por otra, en 2017 presentó a la Generalitat el Proyecto Albufera, cuyos trabajos sobre el terreno arrancaron en mayo de 2018 y han permitido alcanzar la meta del balance hídrico neutro. El éxito de esta iniciativa le ha hecho merecedora del Premio Europeo de Medio Ambiente de la Fundación Biodiversidad.
El objetivo final de Heineken España es trabajar para utilizar solo 2,6 litros de agua por cada litro de cerveza elaborado de cara a 2025. Un desafío que implica reducir más de la mitad su consumo de agua respecto a 2008 y en el que ya ha logrado avances destacados, con una reducción del 33% en 2021.