MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
La Fundación Orange, con motivo del Día Internacional de la Juventud que se celebra este viernes 12 de agosto, ha enumerado una serie de pautas para proteger a los hijos de los peligros de las redes sociales.
En concreto, defiende que crear un entorno de confianza con los más pequeños de la casa «es una tarea clave para lograr una relación sana con las redes sociales». Así, añade que una comunicación fluida, donde se den a conocer los peligros de forma asertiva, «será clave para prevenir que los niños se encuentren con una amenaza a su seguridad».
De este modo, «se les está enseñando a contar con un adulto de confianza cuando algo los haga sentir incómodos o porque simplemente se hayan encontrado con algo despierte su curiosidad, en lugar de reservarse este tipo de situaciones para sí mismos, lo cual es algo que debemos evitar». «Además, nos permitirá conocer cómo nuestro hijo entiende las redes sociales y cómo se relaciona a través de la web», añade.
En este contexto, el director general de Fundación Orange, Daniel Morales, ha subrayado que las relaciones sociales «suponen un elemento decisivo para todos ellos». «Las redes sociales, por su parte, se convierten en un excelente canal de comunicación y, por tanto, se posiciona como una de las herramientas indispensables en su desarrollo social. Por eso, los padres debemos acercarles información sobre ellas, bondades y riesgos incluidos, y permanecer a su lado siempre que lo necesiten», ha señalado.
Para desarrollar esta conversación y que resulte efectiva para ambas partes, la fundación destaca la necesidad de «conocer en qué consisten estas redes sociales, en especial las más utilizadas por los menores».
Para ello, apunta que existen multitud de herramientas que ayudarán a «conocer a fondo estas tecnologías». Por ejemplo, la Fundación Orange, enmarcados en Orange Digital Center, ha desarrollado el curso ‘Redes sociales para madres y padres’, impartido por expertos en este ámbito, que ayudará a conocer el motivo de la adicción juvenil a las redes sociales.
En este sentido, resalta que «es conveniente establecer reglas y regular límites de uso de las redes sociales de los hijos», así como acordar con ellos un horario y un tiempo límite de uso, que no interfiera en su horario de estudio, ni en sus tareas en la casa.
También en lo que se refiere al espacio de uso, recomienda que el ordenador se sitúe en zonas comunes y que se considere un bien familiar, «evitando que se apoderen de él de forma continua».
Por otro lado, defiende insistir a los menores en que «lo importante en su red de amigos es la calidad en las personas que lo integran y no la cantidad, es decir, evitar que acepten amigos de forma sistemática y añadan únicamente a aquellos que sí que conocen bien».
También, apunta que es conveniente restringir al máximo sus opciones de privacidad generales y específicas, controlando así qué personas pueden tener acceso a su información; concienciarles en la importancia de no colgar en sus redes contenido comprometedor, ya que este nunca se pondrá a eliminar por completo; ayudarles a expresar sus emociones a través de la red y también a relativizarlos; y animarlos a comenten o denuncien cualquier anormalidad o abuso que hayan visto en la red.
De acuerdo con los últimos datos arrojados por los estudios del Instituto Nacional de Estadística (INE), el uso de las nuevas tecnologías cada vez está más extendido en las edades comprendidas entre los 10 y 15 años, lo que puede conllevar a problemas como la adicción, problemas de privacidad, ciberbullying, hasta la posibilidad de ocasionar trastornos psicológicos.
«Proteger a nuestros hijos de los peligros que se encuentran en internet, especialmente en las redes sociales, no siempre resulta una tarea sencilla y llega a resultar un quebradero de cabeza para muchas familias. Grandes y pequeños de la casa, vivimos conectados prácticamente las 24 horas del día a dispositivos tecnológicos, siendo la mayoría de ellos smartphones y, con ellos, la conexión frecuente a las redes sociales», concluye la fundación.