Según los cálculos del índice ClosinGap, faltarían 33 años para alcanzar la paridad, que se lograría en España en el 2056
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El cierre de la brecha de género en España supondría sumar 212.000 millones de euros a la economía española, equivalente al 17,6% del PIB en 2021, y la creación de 2,5 millones de empleos femeninos a tiempo completo, según se desprende del III índice de ClosinGap, elaborado por PricewaterhouseCoopers (PwC) este lunes 27 de febrero.
Según los autores del informe, si se sitúa el 100% como la igualdad plena, el nivel de paridad en España en 2022 es del 64,7%, lo que supone un incremento de 1,4 puntos porcentuales respecto a la anterior edición del índice y refleja que la brecha de género ha disminuido en España, aunque queda un 35,3% por superar
Asimismo, el estudio sitúa en el año 2056 el horizonte temporal para el cierre de la brecha entre mujeres y hombres (33 años hasta alcanzar la paridad) lo que supone una mejora respecto a los datos del año anterior, que indicaban que ese hito se produciría en 2058.
«Hemos mejorado, te da alegría y parece que lo que estamos haciendo tiene su sentido, pero después analizas los datos y piensas 33 años, pues es una pasada. Miro a mis hijas y a sus amigas y aún tendrán que esperar 33 años, tenemos mucho más que hacer», ha señalado en la rueda de presentación la presidenta de ClosinGap y presidenta europea de Merck Healthcare, Marieta Jiménez.
Este informe es un indicador de referencia para el seguimiento de la igualdad de género en España y mide la paridad en cinco categorías: empleo, educación, conciliación, digitalización y salud y bienestar.
En este contexto, el estudio desvela que en 2022 se logró avanzar respecto al año anterior –recuperándose los niveles previos a la pandemia– y refleja la evolución positiva en los ámbitos de Empleo, Educación, Conciliación y Digitalización, lo que ha contribuido a reducir la brecha entre mujeres y hombres, a pesar del leve retroceso en Salud y Bienestar.
«Si hay un mensaje positivo es que ya hemos recuperado los niveles prepandemia, no de todos los indicadores pero de la gran mayoría», ha afirmado la directora del Comité Ejecutivo de ClosinGap y la jefa de operaciones europeas en Merck, Ana Polanco.
EMPLEO: AUMENTO DE LA PRESENCIA DE MUJERES EN CARGOS DE LIDERAZGO
Por áreas, el estudio refleja un incremento en el Empleo de 1,1 puntos respecto al año anterior, lo que sitúa la paridad en el 67,2% (frente al 66,1% en 2021). Este incremento se basa en el aumento de la presencia de mujeres en cargos de liderazgo en empresas privadas y en una menor brecha en las pensiones.
Por otro lado, el informe constata que el empleo precario ha disminuido en menor medida para las mujeres que para los hombres, lo que muestra una evolución «menos favorable» para el género femenino. «En pública estábamos ya bastante bien. En privada hemos mejorado de forma sustancial», ha expuesto Polanco.
El indicador refleja que el avance general hacia la paridad también se sostiene gracias al desarrollo en las categorías Digitalización, Educación y Conciliación.
Así, la Digitalización es la categoría con mayor incremento durante el último año, con un 75% de paridad (una cifra 3,6 puntos superior a la referencia del año anterior) lo que supone el «fin al estancamiento que se detectaba en este ámbito en los últimos años», según ha señalado Polanco.
Según el informe, la evolución en esta categoría se ha producido gracias al crecimiento en el desarrollo de las habilidades informáticas de las mujeres durante este periodo. Asimismo, la ratio entre hombres y mujeres especialistas en profesiones digitales ha progresado y se ha alcanzado la paridad en el ámbito de las compras por Internet.
En cuanto a la Educación, su índice se sitúa en el 71,1%, resultado que supone un incremento de 3,2 puntos porcentuales respecto al último análisis (67,9%). «Esta mejora se debe a que los valores de variables como la tasa de abandono escolar, la tasa de educación terciaria y la formación continua de adultos hayan alcanzado y superado la paridad con unos resultados más positivos para las mujeres en todos los casos», ha añadido Polanco.
En este sentido, ha señalado que aún así, el medidor constata que la educación de carreras de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés) tiene una brecha mayor al 50%, aunque haya experimentado una mejoría respecto a los años anteriores.
Mientras, los resultados en el ámbito de la Conciliación también muestran un ligero avance hacia la paridad tras haber aumentado en 0,6 puntos –del 40,8% al 41,4%–, aunque sigue siendo la categoría donde la brecha de género es mayor, ya que supera el 50%.
Según los datos, esta variable sufrió una disminución debido al COVID-19, de la cual no se ha conseguido recuperar todavía. En este sentido, el análisis recoge una ligera disminución en el tiempo dedicado al ocio para ambos géneros, pero se reduce aún más para las mujeres, que ya contaban con menor tiempo libre respecto a los hombres de partida.
«Si conseguimos que las mujeres y los hombres participen de manera equitativa, será una sociedad que crezca, que tenga mayor bienestar y mucho más próspera. Sabemos que al final conseguir cerrar la brecha tiene un impacto directo y económico en la mejora y prosperidad de la sociedad», ha indicado Jiménez.
SALUD Y BIENESTAR: EVOLUCIÓN NEGATIVA
Al contrario que las demás categorías, el informe refleja que la paridad en Salud y Bienestar ha empeorado 0,4 puntos porcentuales respecto el año pasado, cayendo del 84,4% al 84,0%.
De este modo, a pesar de ser la variable con mayor paridad, la evolución del indicador muestra que la tendencia no es favorable debido al riesgo de pobreza y a la reducción de los años de «buena salud» de las mujeres, en relación a su esperanza de vida.
«Estos datos no impiden que sigamos trabajando con ambición y perseverancia a la hora de implementar medidas basadas en el aprovechamiento del talento femenino como palanca clave de crecimiento y recuperación económica», ha expuesto Polanco.