
(Información remitida por la empresa firmante)
El programa, financiado por la Comisión Europea y liderado por el Hospital Universitario Charité de Berlín, ha ofrecido a personas que consumen este tipo de imágenes un servicio de terapia por chat anónimo en distintos idiomas.
UIC Barcelona ha proporcionado la terapia en español y ha evaluado el grado de eficacia de esta intervención terapéutica de cuatro semanas.
El objetivo principal de este proyecto pionero, que ha contado con más de 400 participantes, es contribuir a la prevención de la violencia sexual contra menores de edad a nivel internacional.
Barcelona, 20 de marzo de 2025.- Más del 50% de personas consumidoras de material de abuso sexual infantil que ha recibido el tratamiento ofrecido en el marco del proyecto europeo STOP-CSAM ha dejado de visualizar este tipo de contenidos gracias a una innovadora terapia online. El programa está liderado por el Hospital Universitario Charité de Berlín y ha contado con la colaboración de UIC Barcelona, entre otras instituciones europeas.
Además, los resultados del estudio, financiado por la Comisión Europea, muestran también que aproximadamente el 80% de los participantes logró disminuir el tiempo y/o la gravedad del contenido que consumía tras finalizar la intervención. Asimismo, se han detectado mejoras significativas en el bienestar mental de los participantes.
Más de 2000 consumidores de material de explotación sexual infantil completaron la evaluación de acceso al proyecto STOP-CSAM, que tiene como objetivo prevenir la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes a nivel internacional. El proyecto reclutó finalmente a unas 400 personas entre octubre de 2023 y octubre de 2024 para que participaran en una terapia online de cuatro semanas a través de un chat anónimo con terapeutas especializados, disponible en inglés, alemán, checo, portugués y español. Posteriormente, se les hizo un seguimiento de hasta 12 semanas para medir su progreso. La psiquiatra y médico forense, Esperanza Gómez-Durán, y el psicólogo y experto en metodología de la investigación, Carlos García Forero, investigadores y docentes del departamento de Medicina de UIC Barcelona, han liderado al equipo encargado de ofrecer esta terapia en español y de analizar su grado de eficacia a nivel global.
Los investigadores explican que más de un 90% de los participantes son hombres, de los cuales un 60% se sitúa entre los 18 y los 30 años. Casi la mitad han finalizado los estudios secundarios y más de un tercio de ellos cuenta con estudios superiores. Todos reportaron haber consumido recientemente material de explotación sexual infantil antes de iniciar la terapia, sin embargo, no contaban con antecedentes penales ni judiciales de naturaleza sexual, ni habían cometido abusos sexuales contra menores de edad ya que era un requisito necesario para poder participar en el estudio.
La psicóloga forense e investigadora del departamento de Medicina de UIC Barcelona Thuy Nguyen Vo ha destacado que los resultados son «prometedores» y subrayan «el potencial de las intervenciones en línea para implicar a las personas con conductas sexuales problemáticas, reducir el impacto negativo de su comportamiento y mejorar su salud mental».
El equipo de investigadores de UIC Barcelona ha dejado claro que «el hecho de poder acceder a un recurso de ayuda anónimo, por sí sólo, ya actúa como agente motivador para empezar a cambiar su conducta problemática». En este sentido, ha recordado que un estudio realizado por Protect Children en Finlandia indica que al menos la mitad de los consumidores de material de explotación infantil no detectados desearían dejar de utilizar este tipo de material, pero «debido a la escasez de recursos disponibles, el estigma asociado a la pedofilia y las repercusiones legales, entre otras razones, muy pocos acaban pidiendo y recibiendo la ayuda que necesitan».
La psicóloga forense ha insistido en que hasta la fecha España y otros países carecían de programas de estas características, lo que «dificultaba la intervención en una población de riesgo que, de otro modo, difícilmente accedería a servicios de tratamiento adecuados». «Gracias a STOP-CSAM, se ofrece una herramienta global que permite prevenir conductas dañinas y proporcionar un recurso vital para quienes buscan ayuda», ha añadido.
Una intervención de éxito con continuidad.
Según Gómez-Durán, STOP-CSAM ha sido un proyecto pionero en demostrar el potencial de prevención que tienen las intervenciones terapéuticas anónimas con personas que consumen y buscan ayuda sin haber sido detectados. El éxito de esta experiencia ha sido reconocido por la Universidad Johns Hopkins y The Oak Foundation USA que ya han financiado el nuevo proyecto TD-CHAT, de dos años de duración, como parte de la iniciativa Prevention Global.
Thuy Nguyen Vo ha explicado que la terapia estará de nuevo disponible a partir de abril de 2025 y que el estudio ampliará los prometedores resultados de STOP-CSAM, incluyendo criterios de inclusión más amplios y evaluando condiciones de intervención adicionales. «Se evaluarán los módulos de autoayuda disponibles en la plataforma Troubled Desire como intervención independiente y en combinación con apoyo terapéutico por chat. Con condiciones de estudio adicionales, este estudio nos ayudará a comprender mejor qué componentes de la intervención son más eficaces», ha concluido.
Marta González Martínez.
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