MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La «inmensa mayoría» de las empresas estarán obligadas a publicar sus informes de sostenibilidad, como tarde, en 2027, según ha advertido la abogada de Laboral de Grant Thornton, Marga Guitart.
La experta ha explicado que para 2025 tendrán que entregar sus informes de sostenibilidad las grandes empresas de interés público, de más de 500 empleados, ya sujetas a la directiva sobre información no financiera.
A su vez, en 2026 será el turno de las grandes compañías no sujetas a la directiva sobre información no financiera (de más de 250 empleados y/o una facturación de 50 millones de euros y/o 25 millones en activos totales).
Así, ya en 2027 será el turno para las pymes cotizadas, excepto las microempresas, las entidades de crédito pequeñas y no complejas, y las empresas de seguros cautivas.
En este sentido, Marga Guitart ha advertido sobre las distintas legislaciones que en términos de sostenibilidad afectan a las empresas, tanto a nivel internacional como europeo y nacional.
En concreto, ha destacado la Directiva Europea de Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD) y el Reglamento sobre normas europeas de información sobre sostenibilidad (NEIS).
Ambas legislaciones europeas pretenden «mejorar el reporte de sostenibilidad por parte de las empresas, mejorando su transparencia en lo relativo a su impacto social y ambiental».
En este escenario, asegura Marga Guitart, las empresas se enfrentan «a varias dificultades para integrar los ESG y los ODS en su estrategia corporativa debido a la falta de conocimiento, de capacidad y de recursos, la existencia de múltiples marcos y sobre todo el cambio en la cultura corporativa».
Asimismo, ha apuntado que «la falta de orientación es una dificultad añadida para las empresas, especialmente para las pymes». La experta también ha señalado que prevé nuevas legislaciones sobre transparencia salarial y ley de paridad o a raíz de la irrupción de la Inteligencia Artificial, que «tendrá un claro impacto en el ámbito laboral, particularmente en recursos humanos».
Sin embargo, la abogada ha defendido que «nada de todo esto será plenamente eficaz sin un cambio de cultura en el seno de la compañía, incluyendo a toda la plantilla, de las personas trabajadoras, los cargos ejecutivos y el consejo de administración».